Los padres jugamos con las mates

    El pasado viernes 23 de Octubre tuvo lugar nuestro primer taller de la temporada: "Los padres jugamos con las mates".

    Asistieron cinco madres muy motivadas, con muchas ganas de descubrir el mundo de los materiales manipulativos. 

    En este primer taller para padres y madres sobre matemáticas, nos centramos en las edades comprendidas entre 3 y 6 años. Seleccionamos materiales sencillos, incluso algunos se pueden fabricar en casa sin necesidad de ser un experto. (Podéis echar un ojo al blog de Eva, criaramarvivir.blogspot.com donde se explica cómo fabricar algunos de los materiales que vimos). 

    El taller transcurrió en un ambiente relajado y agradable, dejando así tiempo para la reflexión, para empatizar con el mundo de nuestros pequeños y para sentir y experimentar. De todos los materiales que llevamos, presentamos solo algunos. No quisimos correr y cortar los espacios de reflexión y de compartir que se fueron creando. 

    La primera presentación fue Tarjetas y Contadores. A partir de este material tan sencillo fuimos desgranando la esencia de los materiales Montessori, el porqué de esta filosofía de aprendizaje, ya que consideramos que Montessori es más una filosofía que un método pedagógico. Descubrimos cómo partir de lo concreto nos lleva a interiorizar y comprender mucho más fácilmente conceptos abstractos y cómo la manipulación de los materiales lleva al niño a dominar conceptos como el par y el impar antes incluso de saber cómo se llama a esos números. 

    Continuamos la tarde con la presentación de la Caja de husos. Experimentamos poniéndonos en el lugar de los niños y vimos como con cada material que descubrían, había necesidad de reflexión y de compartir. Cuando presentábamos los materiales era inevitable comparar cómo se aprende con Montessori y cómo se aprende en la escuela tradicional, cómo la mayoría de las veces llenamos la cabeza de los niños de conceptos abstractos que no alcanzan a comprender porque no han tenido la experiencia sensorial previa. 

    Seguimos la tarde presentando los Números de lija, el Tablero del cien, la Caja número 3 de los Triángulos Constructivos. Vimos solo algunas de las múltiples formas de presentación que cada material tiene porque era más importante en este primer contacto con Montessori explicar bien la esencia que cada material tiene detrás. Cuando se explicaban estos materiales inevitablemente los relacionábamos con otros, así acabamos hablando de la Torre Rosa, que no estaba previsto, jeje. Compartimos anécdotas y experiencias de nuestros pequeños y eso enriqueció muchísimo la sesión. 

    Como ya hemos dicho este era un taller dirigido a las edades entre 3 y 6 años, pero como tenemos pensado hacer otro taller con este mismo planteamiento pero para las edades comprendidas entre 6 y 9 años, llevamos los Números Grandes y el Multibase para mostrar que los materiales Montessori tienen una larga vida y continuidad y no solo se usan en Infantil. Este material despertó muchísimo la curiosidad de las familias ya que vieron su versatilidad. Es muy curioso -y suele pasar con los materiales Montessori- ver cómo se pueden trabajar conceptos que aparentemente son complicadísimos o que recordamos de nuestra etapa escolar como algo complicado a través de un material que lo convierte en algo sencillo y natural. Para mí uno de los ejemplos más claros es el Teorema de Pitágoras. Al adentrarnos en los materiales para y más avanzadas acabamos hablando de Primaria y de cuestiones como los deberes o los exámenes, que tanto nos preocupan a nosotras y a las familias que nos acompañaban, que compartían nuestro sentir. 

    Si algo descubrimos el viernes, aparte del mundo de los materiales manipulativos aplicados a las matemáticas, fue la gran necesidad que existe entre las familias de debatir y compartir impresiones acerca del sistema educativo tradicional. En muchos casos tenemos la cabeza llena de inquietudes y dudas y vemos que el sistema que está en marcha no funciona. Nos da miedo que la escuela actual arrase el interés innato de aprender de nuestros hijos y nos quedamos bloqueados pensando que no tenemos nada que decir ni que hacer.

    Así que aquí estamos, ¡trabajando en ello!

    Feliz día.